Creepypastas: "ráfaga de corazón".
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Introduce un bits en el teléfono, se escucha la moneda caer y le permite marcar un número con sus cascos, alguien descuelga el teléfono del otro lado de la línea.
- Hola mamá - dice la voz joven de Flurry Heart. - supongo que ya tienes una idea más o menos clara de lo que pasó, lo siento, maté a varios ponis.
Flurry Heart traga saliva, "varios", que forma más ambigua de decir que por su culpa al menos 100 ponys habían muerto. Uno tras otro, atravesados por un rayo de luz a causa de un estornudo que no controló, un estornudo que activó su cuerno y causó tantos problemas como los causó aquella vez en la biblioteca.
- Mamá, no te quiero hacer llorar - dice por la carencia de respuestas de su madre, solo escucha un mínimo sollozo.
Flurry sabe que esa es la línea de emergencia, que solo su madre la está escuchando y que su padre no hará nada al respecto ya que lleva 10 años muerto, él no tenía la bendición de la longevidad alicornio. Pensándolo bien, era más una maldición que una virtud.
- Si no estoy allí a la misma hora de siempre mañana, tú solo trata de seguir adelante mamá - Flurry Hearts corta la llamada, no puede permanecer más tiempo quieta, todavía no está segura de que nadie la esté siguiendo.
"Sigue como si no importara nada, mamá. Si puedes, solo si puedes, perdoname por no ser la princesa que este reino esperaba... La princesa que este reino merecía", piensa antes de alzar el vuelo.
Nadie volvió a ver a Flurry Hearts en el reino de cristal, aunque su madre nunca dejó de buscarla.
Desgraciadamente, no fue ella quien la encontró.
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